Nuevamente el cine asiático ha sido premiado este año en el Festival de Cannes. En la ceremonia de clausura del último día, el director surcoreano Bong Joon Ho se llevó la Palma de Oro por su película “PARASITE”, una dramática sátira sobre la desigualdad social. El año pasado (2018) el japonés Hirokazu Kore-eda recibió el mismo galardón por “SHOPLIFTERS”. Un gran reconocimiento para estos grandes directores.

Bong Joon Ho recibió el premio de manos de la actriz francesa Catherine Deneuve y el director mexicano, presidente del jurado, Alejandro González Iñárritu.

Conocemos a Bong por sus anteriores films: “SNOWPIERCER” (2014) y “OKJA”(2017) también presentada en el festival aquel año.

“SNOWPIERCER” es un thriller inquietante con elementos fantásticos que recibió numerosas críticas  especializadas muy favorables. “OKJA” es un maravilloso cuento que combina acción, aventura y ciencia ficción, con la dirección de fotografía de Darius Khondji (El inmigrante, 2014). El mensaje ecologista y la crítica al abuso y maltrato hacia los animales está magníficamente narrada por una niña huérfana, que vive en las montañas con su abuelo.  Mija (Ahn Seo-hyun) pequeña e inocente mantiene una divertida amistad con un enorme cerdito torpe y tierno, Okja (resultado de experimentos genéticos). Ambos deben salvarse de los malvados Lucy Mirando (Tilda Swinton) y compañía, en clara alusión a la multinacional Monsanto. “OKJA” está disponible en Netflix y es un film para disfrutar tanto por su bella estética como por su mensaje ético.