EL JOVEN AHMED (Le Jeune Ahmed) 2019
Dirección: Luc y Jean-Pierre Dardenne
Los hermanos Dardenne, directores y guionistas belgas, con nueve películas en su haber, presentaron “El Joven Ahmed” en el Festival de Cannes de 2019, obteniendo el premio a la Mejor Dirección.
Estudiante aplicado, Ahmed (Idir Ben Addi), de tan solo trece años, se niega a darle la mano a su maestra porque “un verdadero musulmán no le da la mano a una mujer”. Así comienza la última película de los Dardenne, que aborda el tema del fundamentalismo islámico.
Con serias dificultades de visión y un físico en desarrollo, Ahmed atiende exclusivamente al Imán Youssouf (Othmane Moumen) de la mezquita de su comunidad musulmana, en la Bélgica actual. Sus ojos son los del imán y su mente está siendo entrenada para ser un terrorista. Sus abluciones rituales y las plegarias se repiten una y otra vez con el minucioso seguimiento de la cámara, característico de los directores en todas sus películas (“El Hijo”/2002)
Una discusión, planteada en la escuela de la comunidad, acerca de la pureza de la lengua árabe, desencadena el conflicto. La maestra Inés (Myriem Akeddiou) propone enseñar canciones en árabe moderno para ampliar el vocabulario de los jóvenes, e insertarlos luego en el medio laboral. Ahmed y su hermano Rachid, se oponen a esto, manteniéndose fiel a la palabra del Profeta, memorizada en el Corán. Su iniciación como apóstol de la jihad es inevitable y Ahmed es detenido.
En la segunda parte de la película, Ahmed entra en el sistema legal belga, que incluye psiquiatras, abogados, consejeros y guardias, además del trabajo de rehabilitación en una granja. Su madre (Claire Bodson) lo visita, pero Ahmed permanece imperturbable, sin empatizar con nadie, salvo con Louise (Victoria Bluck). Así es como el film aligera el ritmo y entra en la etapa de cierre, con alta dosis de misterio.
El final de esta historia, que no voy a contar, deja muchos interrogantes sin respuesta. ¿Los occidentales, somos capaces a comprender, contener y/o castigar esta clase de fanatismos religiosos? ¿Ahmed es capaz, con sus 13 años, de registrar la gravedad de su conducta?¿Con otro final, habría sido posible la redención de Ahmed?
Con o sin respuestas, el planteo de los hermanos Dardenne es muy interesante de contemplar, en este film de 90 minutos.